
Yasuo MINEMURA
Embajador del Japón en El Salvador
El día 1 de mayo de 2011 llegué a este país para asumir el cargo de Embajador del Japón en El Salvador.
Este es el décimo primer destino en el servicio exterior a lo largo de mi desempeño como diplomático, después de cumplir 3 años como Cónsul General del Japón en la ciudad de Calgary, Canadá.
Antes de arribar al país, mi esposa y yo estábamos muy ilusionados por conocer El Salvador, ya que es mi primera designación en América Latina, a pesar de que ya había estado vinculado al área al trabajar dos veces en la Dirección de Centroamérica y Caribe, del Ministerio de Relaciones Exteriores del Japón.
Mi primera impresión de El Salvador es que es un país de amigable y simpática población, con una rica y bella naturaleza. Al admirar el panorama durante 40 minutos a lo largo de la Carretera que conduce del Aeropuerto Internacional de Comalapa hasta la capital San Salvador, nos emocionó profundamente el maravilloso paisaje de abundante riqueza floral y natural.
De la misma manera, el panorama que ofrece la ciudad de San Salvador, rodeada de cordilleras, montañas y volcanes, me hace sentir cómodo, ya que me recuerda el paisaje de Japón, y especialmente el de mi ciudad natal M YOKO, nombre que toma de una montaña, localizada en la prefectura de NIGATA.
El Salvador y Japón poseen una larga y estrecha relación de amistad. He escuchado que los salvadoreños son muy amistosos con Japón. Durante mi misión, mi esposa y yo deseamos entender profundamente a este país, y entablar una relación de amistad con el mayor número de salvadoreños que sea posible. Asimismo, tengo la firme intención de servir para la profundización del entendimiento mutuo y por un mayor estrechamiento de las relaciones bilaterales de amistad y cooperación.
También quisiera expresar mi profundo respeto por El Salvador, por haber logrado la firma de los Acuerdos de Paz después de l largo conflicto armado , y que continúa realizando esfuerzos constantes para alcanzar el desarrollo socio económico, esfuerzo con el cual quisiera juntar el apoyo y cooperación de mi país. Al mismo tiempo, no puedo olvidar la importancia de promover las relaciones económicas de los dos países, por lo que deseo patentizar mi firme compromiso de trabajar por su fortalecimiento.
Finalmente, deseo expresar mi profundo agradecimiento por las muestras de condolencia y solidaridad, ofrecimientos de apoyo de parte del Pueblo y Gobierno de El Salvador tras el Terremoto y Tsunami ocurridos en el mes de Marzo en mi país.
Estoy profundamente convencido que Japón superará las dificultades originadas por esas catástrofes naturales y se recuperará y resurgirá de nuevo, ya que el Pueblo y el Gobierno del Japón han sumado sus esfuerzos para enfrentar este tiempo tan difícil. Ante la solidaridad mostrada por El Salvador tengo toda la disposición de fortalecer aún más las relaciones entre nuestras naciones.