
En el municipio de Quezaltepeque, departamento de La Libertad, el Centro Escolar José Dolores Larreynaga no contaba con las aulas necesarias ni aptas para impartir clases.
Los alumnos recibían clases en los corredores y bajo la sombra de un árbol. Esto impedía el buen desarrollo de las clases y que las mismas se realizaran en un ambiente adecuado para los educandos.
La inversión total de este proyecto es de US$ 125,213.72, de los cuales la cooperación japonesa donó US$116,000 gracias al apoyo del Programa de Asistencia Financiera No-Reembolsable para Proyectos Comunitarios de Seguridad Humana (APCS), se construyeron cuatro aulas en un módulo de dos plantas, el Ministerio de Educación donó el mobiliario, el arquitecto Filadelfo López donó la supervisión de la obra y la comunidad aportó US$5,213.72 en mano de obra no calificada.